jueves, 11 de diciembre de 2014


Impresión de ti

No me mires, no me mires así, 
tus ojos podrían quedar estampados en mis párpados, 
podría llegar al punto de verlos toda la noche aun con los ojos cerrados. 
¿Qué tal que un día me pierda o me caiga mientras intento sacar tus ojos de los míos? 

No me toques, no me toques así, 
mi piel puede percibirte desde que estás como a una cuarta, 
y desde ahí hasta que por fin me tocas es la agonía. 
Ah, pero cuando me tocas, un calor que no quema sale de tus manos y va hasta mis huesos, 
ahí llena mi cuerpo, se mezcla con el aire que respiro y sale de mí cuando exhalo, muriendo. 
Un día, en el afán de prolongarle la vida, contendré el aire hasta que sea mi fin.

No te acerques a mi boca, no te acerques así, 
yo puedo evitar besarte con fuerza y abrazarte, 
pero mi alma, ay, mi alma no sabe de esas lidias, simplemente se sale y se pega de ti.
Vuelve a mí triste por tener que dejarte, luego de estar tan profundamente cómoda en ti.
Yo te haré saber cuando pase, en tanto, no te acerques, no te acerques así.